La Pequeña Empresa quizás pide demasiado....,

La Pequeña Empresa ha sido ignorada, despreciada e invisibilizada por todos los gobiernos, incluido el nuestro, por lo tanto ya casi estamos acostumbrados. Sí nos recuerdan en todos los programas de gobierno de Todos los Partidos políticos, y repiten con fervor y entusiasmo: Que somos más de 500,000 en todo el país, que generamos, incluyendo el subempleo, más del 90% de los puestos de Trabajo, que no paramos en las crisis ni nos vamos del país por "falta de condiciones". Y debe ser cierto: Las PYMES ni pedimos ni esperamos "incentivos" para salir a trabajar, lo hacemos sin valorar condiciones, sin preguntar por lo que marcan los "índices macroeconómicos ni las fluctuaciones en la Bolsa", solo por la pura sobrevivencia.
Pero un día creímos. Y montamos la MESA EMPRESARIAL que trabajó varios sábados dándole forma a la Propuesta que presentamos, el último sábado, al propio candidato Mauricio Funes. Y él nos escuchó, nos felicitó, nos hizo algunos aportes y nos dejó, felices y contentos, esperando la realidad que construiríamos.
¿Cual fué nuestra propuesta? Quizá era mucho, aunque nosotros creímos que era lo necesario. 1o.) Un banco, estatal y de fomento, exclusivo para la PYME. 2o.) La promulgación de la Ley de Fomento y Desarrollo de la Pequeña Empresa. 3o.) Establecer que al menos el 25% de las compras gubernamentales fueran hechas a la Pequeña Empresa y 4o.) Un Viceministerio de la Pequeña Empresa en lugar de la inoperante CONAMYPE. Habían otras propuestas pero para qué.
Dieciocho meses después seguimos esperando, y los que creímos y entusiasmamos a otros hemos tenido que tragarnos nuestra amargura y las pullas de los adversarios que nos retriegan la realidad en la cara. La Política es la misma que tenían los otros: No trabajo conjunto con las Gremiales de la PYME. Se escogen algunas Empresas y se les ayuda en su proyecto y, por supuesto, se publicita profusamente en los medios. ¡Ah, y se está preparando un plan para convertir a las PYMES en exportadoras. Esperábamos otra cosa. Que juntos Gobierno y Pequeña Empresa estableceríamos las bases en que se sostendría un nuevo programa económico mas humano y solidario, que desencadenaríamos un nuevo plan de desarrollo basado en la realidad que la PYME no requiere de millones para aumentar la producción y el empleo, y que el fortalecimiento del mercado interno sería la llave que llevaría a ampliar la capacidad de compra de los salvadoreños. Que hoy sí, los fondos internacionales que vienen y las donaciones que se reciben para la Pequeña Empresa llegarán efectivamente al Sector. Quizá esperábamos demasiado. Quizá pedimos demasiado.